martes, 11 de diciembre de 2012

Taller degustación de tapas en La Casa De Los Quesos

Hola a todos,

disculpad por la larguísima ausencia, me casé hace un par de meses y entre las organizaciones pre-boda, el viaje y la vuelta a la rutina he tardado más de lo que esperaba en retomar el blog.

Y como primer post después de tantísimo tiempo os traigo una experiencia muy recomendable, para que os apuntéis todos los que podáis: alguno de los talleres de La Casa De Los Quesos.

La Casa De Los Quesos (o LCDLQ) está situada en Jesús del Gran Poder, y es una tienda especializada en quesos, mi perdición; y también venden vinos, productos artesanos como mermeladas, salsas, pastas y aceites entre otros. Aqui podréis encontrar quesos difíciles (por no decir imposibles) de encontrar en otro lugar de Sevilla, y delicias como pasta con trufa.

Aparte de ser una tienda estupenda, organiza bastantes catas y talleres. Para enterarte de los eventos, alguna vez que paséis por el lugar podéis pedir que os avisen por email, o seguir su página de facebook. En mi caso me apunté a un taller-degustación de tapas, con un precio de quince euros,que consistía en una explicación del chef José Almenta de la preparación de varias tapas, realizadas al menos con algún ingrediente del negocio, para después probarlas maridándolo con varios vinos. El menú fue el siguiente:

- Mini vol au vent de queso de los picos de europa y geleé de tempranillo
- Ensalada de rúcula, tomates secos en aceite y queso de cabra pinsapo al pimentón
- Rollito de otoño de espinacas, setas y cabrales
- Linguine de trufa con ajos tiernos y parmesano
- Galletas de avena con mascarpone y granada.

Todo estaba muy bueno, y era fácil de preparar, aunque mi plato favorito fueron los linguini, ¡estaba absolutamente delicioso!

Los vinos con los que maridamos tan estupenda comida fueron un verdejo, viña cimbrón verdejo 100%; un ribera, hesvera roble; y un toro, palacio de villachica roble; todos de calidad, aunque por mi gusto personal me quedo con el ribera (el blanco también estaba estupendo, pero quizás el queso azul de la primera tapa era demasiado fuerte para poder apreciarlo bien).

Aparte del aspecto gastronómico de la cita, también hay que destacar el buen ambiente de la reunión, el dueño, el cocinero, la distribuidora de vinos fueron encantadores y estuvieron disponibles para las mil y un preguntas que les hicimos, y los asistentes estábamos todos más que dispuestos a pasar un buen rato y probar cosas nuevas. Además, el aforo máximo es doce, lo que permite que el grupo se relacione y haya un ambiente distendido y agradable.

Al final de la noche, los que quisimos nos llevamos algún que otro producto de la tienda (hacen un descuento a los asistentes) y creo que todos salimos con muchas ganas de repetir experiencia.

Como no hice fotos de nada en absoluto (la falta de costumbre), os dejo con una foto de su página de facebook y con el enlace por si queréis cotillear, recomendándoos a todos los que podáis que probéis porque merece la pena.